Casa de campo muy cerca del pueblo de Petra, famosamente conocido por ser la cuna de Fray Junipero Serra. La casa que tiene mucho caracter ha sido delicadamente rehabilitada usando los elementos más típicos de las construcciones mallorquinas antiguas como la piedra vista, la madera, el marés, los suelos de barro esmaltado, esto permite que la casa tenga la temperatura natural ideal para los meses de verano y para el resto del año está provista de calefacción central. Los propietarios han tenido un gusto exquisito a la hora de decorar la vivienda, rehabilitando y restaurando muebles antiguos como las camas de madera de cerezo con dosel e incrustaciones de estaño y marfil y vestidas para la ocasión con colchas de hilo antiguo bordadas a mano, armarios y mesitas de noche que en su conjunto proporcionan un cálido ambiente a las habitaciones. La casa tiene una espectacular entrada por donde se accede a la planta baja y al piso superior. En la planta baja y en diferentes niveles están el enorme salón comedor con chimenea de hierro fundido, la cocina independiente totalmente equipada con zona de comedor, un aseo y dos dormitorios con baño, uno de ellos en suite. Y en la planta superior otros dos dormitorios cada uno con su baño en suite. La casa tiene además una amplia terraza con acceso a la piscina, provista de un porche amueblado y una amplia zona de solarium desde dónde se pueden contemplar unas mágnificas vistas del entorno. El pueblo de Petra tiene un casco antiguo que está declarado Bien de Interés Cultural; fuera del casco urbano, destaca el Santuario de Bonany, ubicado en un imponente paraje natural protegido, ofrece unas excelentes vistas panorámicas del Pla de Mallorca, la Sierra de Tramuntana y la Bahía de Alcúdia. Petra cuenta con una amplia oferta de bares y restaurantes que abarcan distintos tipos de cocina, desde la cocina tradicional de Mallorca, pizzas y cocina más elaborada. La propiedad está a sólo 20 minutos en coche de las hermosas playas de Sa Coma y S'Illot.